La solución a tu problema de dinero

Es muy simple, consiste en pedir a tu doble, que te resuelva o que te dé la solución a tu problema de dinero. Y ahora explicaré lo que es el doble. Un científico francés llamado Jean-Pierre Garnier Malet ha descubierto que todos tenemos un doble en otro espacio-tiempo que ahora mismo está viviendo lo que nosotros viviremos en un futuro, dentro de un mes , un año o unos años. Esta teoría se llama la teoría del desdoblamiento del tiempo y podéis ver vídeos suyos en internet. La historia es que por la noche, cuando estamos medio dormidos, nos ponemos en contacto con este ser que recoge lo que estamos pensando y sintiendo para manifestarlo en un futuro. Imagina entonces qué pasa si nos acostamos por la noche pensando en que no tenemos dinero, en que cada día somos más pobres y que nada tiene solución. En realidad se puede contactar a cualquier hora y en cualquier momento con el doble, pero la hora más propicia es en la fase REM, cuando nos estamos empezando a dormir.

El procedimiento a seguir es éste. Pídele en cualquier momento del día o mejor aún, a la hora de dormir que te solucione tu problema de dinero, o que te ayude a atraer tal cantidad de dinero. Lo que conseguirás con esto es que tú no tengas que buscar la forma de solucionar el problema, pues el doble lo busca por ti.

¿Cómo vendrá la solución para atraer el dinero?

Lo mejor de la solución es que no tenemos que esforzarnos, pues aunque no lo creamos, vendrá sola. Lo que pasa que estamos acostumbrados a la cultura de que si no somos nosotros quiénes nos movemos primero, no vamos a atraer las cosas, y ese es el gran error, pues nos cerramos a las posibilidades. La solución podrá venir en forma de libro, te encontrarás a alguien que te dice algo, ves un cartel en la calle que tiene que ver con eso. No creas que todo será casualidad, pues el inconsciente sabe dónde buscar cuando le ordenas.

No es que exista Dios o la virgen, son formas de hablar. Lo que existe en realidad es pura física cuántica, o sea, todo es como una energía que se mueve en función de lo que que pensamos. Pero tranquilamente puedes decir “Dios tráeme esto o aquello”, el doble lo va a entender igual.