Ritual para el amor en tu cumpleaños

Si estas soltero, es un ritual ideal para encontrarte a ti mismo y poder atraer todas las mejores vibraciones para que el amor  llegue .

ocupas lo siguiente

1 vela roja
Un poco de miel
Unas gotas de tu perfume
Un recipiente liso, de preferencia transparente o blanco
1 aguja
Una pizca de sal marina (sal gruesa, sal en grano)
Cerillos de madera.

Procedimiento
Lo  primero que debes hacer para iniciar este ritual es buscar un lugar dónde encender la vela. Teniendo en cuenta que vas a manipular fuego, por lo tanto tomar todas las precauciones para no ocasionar ningún incendio. Una vez que identificas el lugar, tienes que hacer un círculo de sal y dentro de ese círculo vas a poner el recipiente donde encenderás la vela. El círculo de sal actúa como protector, sólo atraerás lo que estás pidiendo, te protegerá de espíritus de bajo astral.

Una vez hecho el círculo y colocado el recipiente dentro comenzamos con el ritual. Tienes que tomar la vela roja entre tus manos, si tienes pareja escribir con una aguja el nombre de  tu pareja en la vela desde la mecha hacia la base y tu nombre al lado también desde la mecha hacia la base. Si no tienes pareja, tienes que escribir tu deseo también desde la mecha hacia la base.

Lo más importante cuando inicias este ritual es poner todas tus energías toda tu fe y toda tu fuerza en ese pedido, tienes que estar bien concentrado y en un ambiente cálido y armonioso.
Cuando terminas de escribir, tomas un poco de miel entre tus manos y unas gotas de tu perfume y empiezas a frotar la vela entre tus manos. Siempre concentrado pidiendo lo que más deseas. Cuando crees que es suficiente, tomas un cerillo de madera enciendes la vela y con otro cerillo calientas la base de la vela y la adhieres al plato.

Una vez pegada al plato, observamos un poco la vela y su comportamiento mientras seguimos concentrados en nuestro pedido. Cuando creemos que es suficiente damos tres palmas con nuestras manos, siempre es bueno atraer buenas vibraciones, tres pasos para atrás y nos vamos.
Podemos mirar la vela de tanto en tanto pero no es bueno estar controlando, la debemos dejar que ella trabaje, siempre depositando nuestra confianza en lo que estamos haciendo y en el universo. 
Si la vela se apaga, no te preocupes la vuelves a encender, cuando termina de consumirse miramos sus restos, intentamos visualizar cuáles son los restos porque muchas veces nos dejan mensajes importantes a través de figuras.
Los restos de vela y la sal debemos quitarlos fuera de la casa y el plato lo lavamos con agua y sal o con vinagre blanco.